El síndrome del gato paracaidista

Los gatos son ágiles e inteligentes, pero durante los meses más cálidos pueden llegar a sufrir lo que se conoce como el síndrome del gato paracaidista. En esta época del año los veterinarios atendemos en la consulta numerosos casos de caídas de gatos.

Como ya sabéis, los gatos tienen un equilibrio increíble, lo que hace que tengan poco miedo a las alturas y disfruten posándose en los lugares más altos. Ahora en verano, acostumbramos a tener las ventanas abiertas para sobrellevar mejor el calor y muchos dueños asumen que por su agilidad nunca se van a caer. No obstante, aunque los gatos pueden aferrarse a la corteza de los árboles con sus garras, las superficies de los edificios (azulejos, hormigón, ladrillo…) son mucho más resbaladizas, menos rugosas, lo que puede hacer que pierdan el equilibrio y se caigan.

Cuando caen no aterrizan en ángulo recto con sus patas traseras, sino que lo hacen con sus patas abiertas de manera que pueden causarles graves lesiones en la cabeza y en la pelvis.

Aunque es cierto que hay una tasa de supervivencia muy alta si reciben atención veterinaria inmediata y adecuada, es importante seguir los siguientes consejos para prevenir caídas innecesarias:

• Instala cristales, pantallas resistentes o mosquiteras en todas las ventanas.
• Asegúrate de que los vidrios o cristales están firmemente acuñados en las ventanas.
• Los gatos pueden deslizarse a través de las rejas de seguridad para niños, así que cuidado cuando abras la ventana porque se pueden colar por ellas.
• Evita que se sitúen en ventanas que dan al exterior. Los gatos tienden a fijarse en cualquier estímulo que pueda hacer que pierdan el equilibrio.

 

Fuente: Animales y mascotas. La Razón.